Por: Patricia Castellanos
Miles de centroamericanos continúan su lucha por lograr el “Sueño Americano”, luego de haber pasado por la frontera con Guatemala en muy complicadas circunstancias, para después seguir su paso por el estado de Chiapas hasta llegar a Oaxaca, los poco más de 6 mil personas, entre ellos, mujeres, hombres, adultos mayores y niños que forman parte de la caravana migrante, se instalaron desde el pasado martes en la terminal de autobuses de segunda clase ubicada en la Colonia La Joya de Juchitán de Zaragoza, municipio de Oaxaca ubicado en la región del Istmo de Tehuantepec.
En dicho espacio fueron instalados módulos de atención por parte del gobierno municipal, gobierno del estado, y derechos humanos, sin embargo ante el número tan grande de migrantes, no ha sido suficiente la comida y asistencia para los centroamericanos, por lo que algunas organizaciones civiles, incluso sociedad civil, se han acercado a la zona para apoyarlos con alimentos, ropa, y hasta cartones, lonas y plásticos para que puedan improvisar algunas chozas y descansen.
Con visibles carencias, algunos en grupos con familias de hasta 5 hijos, continúan la difícil travesía hacia el “Sueño Americano”, todo, a pesar de lo complicado y peligroso de esta ruta, y sin ninguna garantía de que llegado el momento puedan pasar la frontera de México con Estados Unidos.
Sin embargo, los migrantes no pierden la esperanza de lograr la posibilidad de aspirar a un futuro mejor con sus familias, ya que dicho por ellos mismos, y reflejado en algunos testimonios “todo es mejor que permanecer en su país”, donde señalan todo es carencia e inseguridad para los suyos.
Cabe destacar que próximas horas definirán por donde continuar su ruta, algunos pequeños grupos se han adelantado en el camino, sin embargo la mayoría se concentra en la llamada “Caravana del Éxodo Migrante”, para la cual están buscando la posibilidad de que les habiliten apoyo con transporte urbano y puedan trasladarse de forma más rápida, menos cansada y peligrosa, ya que han recorrido cientos de kilómetros a pie y aún les falta más por recorrer, pero aún no han obtenido respuesta.
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